sábado, 9 de octubre de 2010

Empezamos...

...nueva vida. Llevo tres semanas en Barcelona y sólo hace una que yendo a clase, he empezado a trabajar, a conocer gente, a hacer de niñera, e incluso a hacer deporte. Ya casi tengo el cuarto completamente organizado, y más o menos conozco mi barrio.
Es increible. Es que no puedo decir nada más, me encanta estar aquí, a pesar de que sé que quiero quedarme más tiempo del necesario. El Institut del Teatre es una pasada en todos los sentidos: buenos profesores que disfrutan enseñando, buenos compañeros con quien compartirlo, buenas instalaciones, y tampoco me quejo del plan de estudios (bueno, ingual me quejo un poco más adelante, ya se verá). Y luego la ciudad: hay bibliotecas en cada esquina en las que puedes sacar como 30 documentos a la vez, has polideportivos con miles de programas a buen precio, hay carreras populares todos los findes aquí o allá, y una oferta cultural grandísima. Y detrás de mi casa, parques, parques y más parques. Por cierto, estoy a un tiro de piedra del IT.
En cuanto al trabajo, pues por un lado de niñera esporádica, que no está nada mal; y por otro de profesora de rítmica tres horitas a la semana, cosa que me hace muy feliz.
Con lo que más estoy flipando es con la gimnasia estética. Ayer hice una clase de prueba y buah, qué grande. Tienes algo de rítmica, algo de danza, y un punto expresivo único, muy teatral también. Y aunque estoy hecha una abuela ocotgenaria, ayer lo disfruté enormemente.
Lo único que tengo un poco más en el aire es el francés, mi horario es de Lunes y Miércoles de 17 a 19h, concidiendo justamente con mi horario laboral. Yuju (por favor, remárquese la alegría de la onomatopeya). Así que me tienen que hacer un cambio de horario en cuanto les lleve el contrato que aún no me han hecho, pero bueno, se supone que están obligados a cambiarme.

Y nada más, que ya tengo internet en el piso y eso mola, pero vicia. Así que me voy.
Sed felices cual perdices.

No hay comentarios: