Al final de este viaje...

Me voy mañana. A Francia, por un mes. Objetivo: coordinar un campo de trabajo.
La verdad es que estoy un tanto acojonada. Primero, que aún no tengo hecha la maleta y me quedan menos de 12 horas para subir al avión. Segundo, que mi francés ha decaído enormemente en los últimos meses. Tercero, que el éxito o fracaso de mi trabajo no depende sólo de mí, sino también de los voluntarios que me toquen en el proyecto. Vamos, que estoy muerta de miedo. En realidad no tanto. A ver, me preocupa, estoy nerviosa y todo eso, porque es el primer campo al que voy de coordinadora, pero sé, muy en el fondo, que todo va a salir bien. Creo que aún no me he hecho a la idea de todo el proyecto, pero mola. Siempre todo en el último momento.
Bueno, a parte de eso poco más que contar. He estado una semana en Valencia con mi familia y amigos, sin parar quieta ni un segundo. Se agradece, pero tampoco podía alargarlo mucho más si quería que mi salud mental no peligrase (y mi salud mental me preocupa ampliamente, la verdad). Así que se ha hecho un poco corto, pero es lo que toca.
Ahora, es el momento de despedirme y de acabar de prepararlo todo (y dormir un poco, tampoco me vendría mal), así que muy buen verano a tod@s.
Sed felices cual perdices.

:)

Adaptación

La gran putada de tener tanto tiempo libre, es que puedes escucharte mucho. Y eso, a veces, genera ciertos conflictos.
Como tener que luchar con uno mismo las 24 horas del día...

Palabras

Hay palabras que valen más que otras.

Hay palabras vacías, cuyo significado es insignificante para quien las recibe, aunque no para quien las dice. Valen mucho como símbolo, pero no significan nada. No perduran. Se pierden en el silencio que las sigue, un silencio que equivale a una falta de entendimiento mútuo. Querer y no poder son estas palabras.
Hay palabras sencillas, que no quieren significar nada, pero que son sinceras, auténticas. Sabes reconocerlas enseguida, porque van directas a lo más profundo de nuestro ser.
Hay palabras violentas por ambas partes, cosas que no se quieren decir pero que demuestran una auténtica amistad sincera. Cosas que duelen. Éstas, son las más valiosas de todas. Son certeras, directas, con doble filo, siempre te hieren. Decirlas, y también aceptarlas, supone un acto muy valiente. Resuenan en la memoria durante mucho, mucho tiempo. Te hacen reflexionar, y plantearte las cosas. Te dejan descolocado. Te obligan a pensar.

Pero todas ellas son, al fin y al cabo, lo mismo: PALABRAS.
La decisión de qué hacer con ellas es sólo tuya. Puedes escucharlas, puedes ignorarlas, puedes rebatirlas...
Eso está en tus manos.

Time after time

Lying in my bed i hear the clock tickin', think of you
turning in circles, confusion is nothing new
flashback to moon nights, almost left behind
a suitcase of memories, time after sometime.


I think you don't know how important you have been to me. How much I admire you, how much I love you, how much I need you, how much I will miss you. You have been my Sun and Stars, you gave light to my worst days and made me smile even when I thought that was not possible anymore. You taught me, supported me, and accepted me.

And now that this is over, I can't stop thinking what's going to happen. I don't wanna lose you. I want to keep that friendship for a lot of years, for the rest of our lifes. Even if you are milles away, I don't care. I'll phone you, e-mail you, take a plane to see you. And I'm not joking. Whatever will be necesary to make you feel as confortable as I have been.


Thanks again, I won't stop saying it.

¡¡¡LIBERTAD!!!

Vosotros que os escondéis tras muros,
vosotros que os escondéis tras escritorios,
sólo quiero que sepáis
que veo a través de vuestras máscaras.

Vosotros que no habéis hecho nada
salvo construir para destruir,
vosotros jugáis con mi mundo
como si fuera vuestro juguetito,

Vosotros os escondéis en vuestra mansión
mientras la sangre de los jóvenes
se escapa de sus cuerpos
y se hunde en el barro.

Vosotros habéis extendido el peor miedo
que jamás pueda ser gritado,
miedo a traer hijos
a este mundo,

Me parece que descubriréis
cuando vuestra muerte cobre su peaje,
que todo el dinero que hicisteis
nunca comprará de nuevo vuestra alma.

Спасибо!!

Por hacerme volver a apreciar lo bello de estos deportes, por hacer que me entusiasme de nuevo en cada entrenamiento, por los estreses, los miedos, los nervios...
Porque esta temporada está yendo genial, por la experiencia que estoy compartiendo con vosotras, por las fotos, los bailes en la discoteca, los "on the floor", los "no sé si dona temps...", los 1000 euros, los e-mails bomba y los e-mails flores, las cenas, las fiestas, los cumpleaños...
Porque me habéis hecho sentir como en casa aún no estándolo.
Por todo lo habido y por haber,

GRACIAS.

Porque aún nos queda Estonia. Y Alemania. Y Moscú. Y la temporada que viene con el fin del mundo y los sponsors de mr. Kirilenko.

¡Baila!

Todo lo bueno se acaba. Incluídas las vacaciones. Ayer me despedí de mi maestro, que ha estado con nosotros estos últimos días y se volvía a Madrid. Ha sido un gustazo compartir ese tiempo con él. Hoy, mi hermano vuelve a Valencia. Mañana empiezan las clases. Recta final, el último esfuerzo antes de terminar el curso. Y el miércoles de vuelta a los entrenamientos.
He de reconocer que, aunque estos días no han sido fáciles y ociosos, he podido descansar. Al menos un poquito. Pero ahora mismo, conforme me he levantado, se ha apoderado de mí un nerviosismo, una necesidad de actividad frenética pre-postvacacional.
Limpiaré la casa, abriré las ventanas de par en par y dejaré que entre el aire, para que pueda llevarse toda la tristeza, todo el cansancio, todos los remordimientos... ¡Que entre el aire en esta casa! Quiero que cada rincón, que cada esquina, que cada recoveco de este lugar quede impregnado de brisa primaveral. De nuevas esperanzas, de nuevos (y viejos) retos (renovados), de nuevas fuerzas para vivir la vida.

"Ponte al sol, para que cristalicen esas deliciosas gotas; se convertirán en magníficos diamantes..."


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