sábado, 27 de marzo de 2010

Le Moulin Rouge


Uno de los sitios que más me ha gustado de París, quizás en parte debido a una de mis películas favoritas, que lleva el mismo nombre. A modo nostálgico y para aplacar la típica añoranza posterior a cualquier gran viaje, he acabado de verla de nuevo hace unos minutos. Es posible que sea debido al... digamos estado amoroso en el que me encuentro en estos momentos, pero es la vez que más me ha gustado de todas las que la he visto, y no han sido pocas. Cuando llegas al final de una película, ese final con el que siempre lloras, y te das cuenta de que las lágrimas no resbalan ahora por tu rostro, pero que sientes como un gran dolor en el alma..., te das cuenta de cómo le cambian a uno los años. Recuerdas todo lo que ha pasado desde aquel día en el que alguien te cogió la mano y te enamoró hasta ese otro en el que volviste a ver a otro alguien que te había enamorado de nuevo. Piensas en lo difícil que es eso del amor, y no sabes cómo tomarte tu resolución de no estar con nadie por no hacerle daño. ¿Es que soy una ingenua por ello? Es posible, pero después de todo el daño que me han hecho a mi, no me parece justo hacer lo mismo a otra persona, por mucho que me duela.

1 comentario:

Amp dijo...

"estado amoroso en el que me encuentro en estos momentos".
Hello? Did I miss something? ¬¬'